Lima está en temporada de playa. A tan solo una hora existen lugares donde puedes bañarte, comer un ceviche y disfrutar del atardecer, ¿no sabes en dónde están? Tranquilo, para que escapes de la ciudad hemos seleccionado tres hoteles pensando en ti.
Nuestro preferido. Km 51, San Bartolo, Kauhuhu Casa-Hotel
Imagina tu casa de vacaciones ideal: luminosa, con una pequeña piscina y una onda relax…Así es el Kauhuhu Casa-Hotel. Tienen 9 habitaciones (6 matrimoniales y 3 familiares). La decoración fusiona la casa de un surfista hawaiano con planchas colgadas en la pared bajo techo de palmera y una tienda bohemia de antigüedades. Apenas entras y ya te sientes en casa. El sofá comodón y la mesa familiar al lado de la piscina te lo confirman. Toda la casa está pintada de amarillo cálido, turquesa luminoso y blanco inmaculado. Las habitaciones más cotizadas están ubicadas en el segundo piso: son dos matrimoniales como nidos íntimos, bajo un techo de bambú. Tienen terrazas interiores desde donde se divisan a lo lejos las playas de San Bartolo en forma de media luna. Una de ellas también tiene un jacuzzi exterior. Cuentan con una cocina que ofrece cafés, jugos y sanguches o menús del día servidos en la mesa familiar abajo o en un pequeño espacio tipo cafetería en el segundo piso con vista a las playas. Miguel y Giuliana, los dueños, son abiertos, sonrientes y muy buenos consejeros.
San Bartolo es un destino ideal si tu hotel no tiene cocina abierta a los huéspedes o no cuentas con movilidad. Este pueblito es muy animado. Tiene su mercado para comprar frutas o tomarte un juguito, y unos restaurantes o cafés bien simpáticos. Si vas encontrarás la Milonga del Santito para pastas, empanadas y música en las noches. Otro lugar es Donde Arturo Brandon (Av. Mar Pacifico 520) para las pizzas crujientes. Está también el Uzal (Los Barcos 178) para disfrutar helados cremosos de tradición italiana, cafés y queques caseros o quiches. Y recientemente abrió sus puertas La Cosecha que propone cocina orgánica y vegetariana desde desayuno hasta el atardecer.
Si te animas a tomar clases de surf puedes contactarte con Matías de Sunset Board o José Antonio de Jah Surf. Hay una bahía para los profesionales con olas más grandes y una que ofrece olas chicas ideal para empezar. Fuera de temporada, en San Bartolo, estarás seguro al respirar aire marino entre dos museos o caminatas.
Tarifas: de noviembre a abril, matrimoniales de 200 a 350 soles y familiares (hasta 4 personas) de 400 a 450 soles. De mayo a octubre, matrimoniales de 150 a 275 soles y familiares de 250 a 360 soles. El desayuno es un servicio extra.
Para bohemios y artistas. Km 92,5. Chocalla, El Pez Iluminado
Asia y sus playas son sin duda el lugar de moda por la gente más adinerada. Muchos tienen casas de playas por allá que son residenciales cerradas con piscinas. Muy cerca encontrarás el Bulevar de Asia con sus restaurantes, bares, discotecas, tiendas de moda. No esperes un Malecón frente al mar: el Bulevar es un centro comercial grande y a cielo abierto a un paso de la Panamericana Sur.
El Pez Iluminado está totalmente contra la corriente. Fue en su época un rincón en medio de las chacras y campos. Ahí su dueño, el artista y amante de la vida Manuel Luna, construyó una casa de arquitectura colonial inmaculada en medio de un pequeño jardín hermoso. Alquilas un cuarto sencillo (algunos tienen baño privado y otros tienen un baño para compartir entre dos cuartos), puedes llevar todo lo necesario para hacer tu parrilla, y hay un horno para pizzas caseras. Si tienes flojera sabes que la modernidad y el bulevar de Asia está a dos pasos. El Pez Iluminado es un refugio fuera del tiempo, un nido chiquito al lado de los condominios. Las playas están a 15 minutos caminando. Tienes que dar vueltas entre las residenciales lo que resulta un poco molesto pero ten paciencia: al final llegarás a una inmensa playa y kilómetros de arena.
Tarifas: entre 100 y 200 soles la habitación según el tipo de cuarto (baño propio o compartido entre dos habitaciones). Pedir desayuno extra con anticipación.
Para familias. Km 48, Punta Negra, Ola Grande Hostel
Punta Negra es un balneario popular que aun no ha sido contagiado por la ola bohemia. Al fondo del balneario se ubica la playa Las Pocitas conocida también como del Puerto o Bikini. Ahí se bañan todos los que vienen por un día. Un espacio entre las rocas forma una piscinita tranquila. Aprovecha y anda en las mañanas antes que se llene. Ahí veras una cruz arriba de un pequeño mirador desde donde tienes una vista panorámica. Hay pequeños kioscos con techos de palmera, puedes tomarte algo pero te aconsejamos comer en el mismo hotel donde te alojas.
Justamente al otro lado del Malecón encontramos el Hostel Ola Grande. Una historia típicamente peruana: la de Héctor y Jenny que construyeron de a poco su casa y la transformaron en un hotel simple pero simpático de 20 habitaciones. Tienen matrimoniales interiores (las más económicas,) matrimoniales en el primer piso con vista al mar a unos 250 metros, y queen o familiares con terrazas y vista más panorámica. El hotelito de 3 pisos es inmaculado con toques azules y sombrillas amarillas. Las habitaciones son sencillas pero tienen tv, baño propio y agua caliente. Y, como música de fondo, las olas que rugen con fuerza. Se disfruta caminar por la playa ancha y observar el ballet de las gaviotas. En el pueblo, no hay mucho que ver y, después del atardecer, es algo desolado. Pero en Ola Grande preparan comida marina típica los viernes, sábados y domingos y trabajan con restaurantes para delivery. Se puede comer ceviche, arroz con mariscos o chicharrones de pescado, pollo a la brasa o pizzas en la noche. Lo básico pero correcto. El hotel ofrece también una pileta redonda de 1 metro de profundidad y un bar muy bien abastecido. Llega un día de semana cuando todo es tranquilo o un viernes. Los fines de semana varias discotecas atraen otro público.
Tarifas: de noviembre a abril, matrimoniales interiores de 150 a 250 soles, matrimoniales con vista al mar de 200-300 soles y queen con terraza y vista de 300-400 soles. De mayo a octubre, matrimoniales interiores 100 soles, matrimoniales con vista al mar 150 y queen con terraza y vista 200. El desayuno es un servicio extra.
¿Y cómo voy?
En taxi: hasta Punta Negra o San Bartolo, por 140 soles ida y vuelta más peaje
En combis: paradero abajo del puente Benavides. La couster blanca con rayas marrones va a Punta Negra o San Bartolo. En temporada de verano, encuentras autos colectivos por el Puente Atocongo en Surco. Van a Punta Hermosa, San Bartolo o Asia.
En bus: Perú Bus tiene salidas cada 15 minutos las 24 horas del día. Puedes solicitar bajar en Punta Negra, San Bartolo o Chocalla , te dejan al lado de la pista. Sigues con mototaxi o caminando.